Un bebé de tres meses identificado como David Barbosa, que iba en uno de los autos involucrados en un choque frontal el pasado sábado, en la ES-060, en Presidente Kennedy, en la sureña región de Espírito Santo, Brasil, tuvo un deceso encefálico confirmado la tarde de este viernes pasado.
Con su fallecimiento, suman un total de cuatro personas que perdieron la vida en este lamentable accidente.
El niño estaba intubado desde el día del accidente. Ese día, una familia de Río de Janeiro que viajaba en el otro automóvil perdió la vida en el lugar.
“Desafortunadamente, fue a parar a los brazos de Dios. Agradecemos a todos los de Espírito Santo que ofrecieron oraciones de corazón. Estamos muy tristes, pero sabemos que Dios lo acogió porque era lo mejor”, dijo Cristiano Barbosa, abuelo del niño.
El bebé David Barbosa fue hospitalizado en el Hospital Materno Infantil Francisco de Assis (Hifa) en Cachoeiro de Itapemirim. Según el abuelo, el padre del niño sigue hospitalizado.
El velorio fue este viernes pasado, y el entierro tendrá lugar este sábado, en São Francisco do Itabapoana, donde vive la familia. Todavía no hay información sobre los horarios de las ceremonias.
Otras siete personas, cuatro adultos y tres niños, uno de ellos el bebé David, iban en el otro vehículo, un coche más grande.
Con excepción del bebé David, los otros seis ocupantes resultaron heridos y fueron trasladados a hospitales de la región. El automóvil era un modelo que podía llevar esa cantidad de pasajeros, según la policía.
El accidente ocurrió cerca de la frontera con el estado de Río de Janeiro.
Según la policía, en ese mismo accidente, perdieron la vida otras tres personas que iban en el otro vehículo.
Los que perdieron la vida en el lugar fueron identificados como Monique Campos Veloso, de 46 años; su hija, María Clara Veloso, de 13 años, y el novio de Monique, Michel Abud, de 38. Salieron del interior de Río de Janeiro para participar de la Fiesta de Nieves, en el Santuario de Nossa Senhora de Nieves, en Presidente Kennedy.
La fiesta es un evento religioso tradicional en la ciudad y cada año atrae a miles de fieles y visitantes al Santuario.
Monique y María Clara vivían en Campos y Michel en São Francisco do Itabapoana.
El accidente ocurrió cuando la familia se dirigía hacia Río de regresó a casa, alrededor del mediodía.
Los cuerpos de los que perdieron la vida en el lugar fueron enviados al Servicio Médico Legal (SML), de Cachoeiro de Itapemirim para luego ser entregados a sus familiares.
La carretera se cerró y el tráfico continuó en un sistema de parar y seguir. Aún no se sabe qué provocó el accidente.