Una joven de 21 años, identificada como Huang, se encontraba esperando el autobús cuando un infortunado incidente cambió su destino de manera drástica.
Un aire acondicionado de aproximadamente 30 kilogramos se desprendió desde el piso 17 de un edificio y la golpeó, causándole heridas graves.
A pesar de que fue llevada de inmediato al hospital, lamentablemente no logró sobrevivir a las lesiones. El trabajador responsable de la instalación del aire acondicionado, un hombre de 31 años de apellido Li, fue detenido inmediatamente por las autoridades y llevado a la comisaría.
Li, al enterarse de que su descuido momentáneo tuvo consecuencias fatales para una persona inocente, mostró un profundo remordimiento y culpabilidad. Con la cabeza gacha y en silencio, expresó su pesar por la trágica pérdida de Huang ante los medios chinos.
Este suceso ha conmocionado a la comunidad y es un recordatorio de la importancia de mantener la seguridad en la instalación y mantenimiento de equipos en los edificios para evitar este tipo de accidentes
