¿Qué significa cuando tu pareja te pide un oral?
La percepción del sexo oral ha mutado con el paso del tiempo. De ser algo pecaminoso ya es una alternativa válida y en ocasiones, primordial, en las relaciones de pareja.
La escritora Peggy Orenstein en su nuevo libro «Navigating the Complicated New Landscape».
Explica qué significa que te pidan sexo oral, y cómo ha cambiado esto desde entonces. “No es sexo. Es una forma de enrollarse. Como ir un poco más lejos, sin que signifique gran cosa”, mencionó la autora.
El auge de la práctica del sexo oral ha subido con el paso de los años. Sin embargo, no quiere decir que las parejas lo disfruten por igual. En algunos casos, es una obligación para mujeres que, en ocasiones, no son correspondidas.
Que significa cuando tu pareja te pide un oral
En su libro, Orestein llegó a la conclusión que el sexo oral se hace para salir del paso, tildándole como un “comodín”. Tanto que, para algunas mujeres, sería como sustituir las relaciones sexuales para llegar vírgenes al matrimonio.
“A veces, una chica se la chupará a un chico al final de la noche porque no quiere tener sexo con él, pero espera ser satisfecho. Así que, si quiero, hago eso para que se marche sin que pase nada”, explica una joven llamada Anna que fue parte de los testimonios de la escritora.
Según encuestas realizada por la autora, 25% de las mujeres practica sexo oral para mejorar su relación, mientras los hombres indicaron que lo hacían por placer.
En la sociedad…
Peggy confesó que los testimonios recopilados le hicieron inferir que «el sexo oral ha sido utilizado por muchas jovencitas para hacerse amiga de chicos populares. De esa forma, acumulan «puntos» para salir con alguien sin llegar a hacer el amor, para decir he salido con este y con aquel para incrementar tu estatus social”.
Otro de los testimonios que recoge el libro de Oristein es el de una mujer llamada Gretchen que asegura que «el sexo oral es asqueroso», reconociendo que no es divertido para ella, pero que da la sensación de “¡ja!, no podrás conseguir esto de otra, tengo el control”.
Además, asume que “es siempre la misma secuencia tácita: te enrollas, entonces te toquetea, se la chupas, y se acabó. Creo que las chicas no pueden expresar sus deseos. Somos criaturas dóciles que aprenden a complacer” dijo Sam, una joven que aportó su testimonio.
Como conclusión la autora señala que «el sexo oral ha sido objeto para contener, desviar y controlar a un hombre, en los últimos años».